El trekking es una actividad que se practica en todo tipo de terrenos, y no tiene restricciones de edad, sexo o condición física.
Como en toda actividad existen diversos grados de dificultad, y se puede ir subiendo gradualmente a medida que se va adquiriendo experiencia. Las rutas se dividen en cuatro tipos de dificultad: leve, media, moderada y difícil.
Esta especialidad presenta variantes como el trekking de ascensión o ascensionismo, que requiere de un entrenamiento físico previo y de conocer ciertas reglas básicas de seguridad.
Para realizar trekking es bueno que se tenga en cuenta adecuar el nivel a las capacidades de uno, utilizar los terrenos marcados y se recomienda llevar bastón, ya que éste soporta el 8% del peso corporal.
Por último, a la hora de armar el equipamiento para realizar una expedición, hay que recordar que cada persona puede cargar, como máximo, hasta el 20% de su peso, para evitar dolores de espalda y cintura, por lo que se aconseja llevar lo justo y necesario.
El entorno de la selva frondosa es un imán para hacer una parada en la Quebrada de San Lorenzo, donde el esplendor de la naturaleza sorprende al viajero.