Todo el balneario vive dentro de un monte donde los árboles compiten en altura y densidad; el perfume de cada una de las especies compone un solo aroma vegetal.
Una de las características de Cariló es haber crecido como pueblo turístico sin abandonar sus accidentes originales. Así, la fijación de los médanos y la tarea continua de plantado de especies han dado sus frutos: un bosque abigarrado ampara de los fuertes rayos del sol del verano y complementa las actividades playeras.
Ni el ambiente salino ni el viento intenso ni el suelo arenoso sin retención hídrica han logrado amedrentar el desarrollo de pinos, acacias y aromos a lo largo de los años. La tarea comenzó en 1920, a cargo de Héctor Guerrero, uno de los pioneros del implante de grandes números de ejemplares, que luego se fueron reproduciendo.
A pie, nos internamos en un sector del bosque para sentir su vitalidad, su perfume y cada una de las sensaciones que llegaron a nuestros sentidos. No hay edad para disfrutar de una caminata entre troncos que se pierden en las nubes, para detectar su humedad ambiente y para dejar que cada uno de nuestros pasos se pose sobre las hojas viejas que tapizan el suelo.
Fuimos encontrando una casa aquí y otra más allá, muy cómodas de espacio y rodeadas de jardines espléndidos. El estricto código urbano de Cariló reglamenta la construcción en el área boscosa a fin de no dañar el entorno.
Visitamos la Feria del Bosque, cuyo mayor atractivo es el lugar donde fue instalada. Sus locales están dispuestos de forma tal que los árboles sigan su crecimiento y acompañen el recorrido. La aventura espera a su vez en el Bosque Aéreo, un entretenimiento para “volar” entre puentes, tirolesas y plataformas ubicados en el follaje.
Los Conciertos en el Bosque de Cariló ya cumplieron 20 años de vida y son una de las reuniones gratuitas más esperadas. Se realizan al aire libre y están a cargo de músicos de excelencia. Sentir el silencio de los presentes junto al sonido de los distintos instrumentos musicales es uno de los momentos más sublimes que pueden esperarse en un entorno natural de estas características.
El bosque es la vida misma de la ciudad. Cariló nació entre árboles y seguirá fiel a la necesidad de sus habitantes de preservar ese espacio de pureza y hacerlo respetar por quienes llegan de visita.
Mónica Pons
Pablo Etchevers
Ubicación
Conocé más lugares de interés en Cariló
Terminos y condiciones
Contacto