A la reserva de lobos Cabo Blanco

Un viejo faro permanece altivo en ese desolado sector de la costa marítima, donde buscan cobijo aves y lobos marinos. Una referencia turística inolvidable.

Entre los muchos atractivos que ofrece Puerto Deseado, existe uno que permite curiosear desde cerca una colonia de lobos marinos que desde 1937 compone la reserva natural intangible Cabo Blanco.

Para llegar a ese peculiar destino, hicimos una travesía por la agreste meseta patagónica a lo largo de 90 kilómetros por una ruta casi desértica. Primero sobre asfalto y luego sobre ripio, nos ofreció un espectáculo que no olvidaremos: la presencia de guanacos, choiques y maras que se entrecruzaban entre sí animó el trayecto.

Al acercanos finalmente a la costa, pudimos observar un faro alto, elegante, de ladrillo rojo y en forma de cono. Luego tuvimos una vista panorámica de la costa marítima, con sus playas bañadas por las olas y un perfume a sal característico.

Llegamos a ese espacio rocoso donde desde 1937 se cuida una multitudinaria especie que elige el lugar para desarrollar su vida familiar. Realizamos un pequeño trekking para acercarnos al sitio donde veríamos a los lobos marinos y cormoranes en primera fila.

  • Un viejo faro permanece altivo

    Un viejo faro permanece altivo

  • Colonia de lobos marinos

    Colonia de lobos marinos

  • Reserva natural intangible Cabo Blanco

    Reserva natural intangible Cabo Blanco

  • Se alimentan de mejillones, pequeños peces y pulpitos

    Se alimentan de mejillones, pequeños peces y pulpitos

  • 87 metros sobre el nivel del mar

    87 metros sobre el nivel del mar

Nuestras máquinas fotográficas dispararon muchas veces para intentar capturar algunas escenas con las clásicas poses de manos y pies en forma de aletas abiertas tomando sol sobre la piedra.

Nuestro guía nos informó: “Son lobos marinos de uno y dos pelos y es la colonia más numerosa de la costa. En los siglos XVIII y XIX se los cazaba para obtener cuero y grasa y casi se extinguen. Se alimentan de mejillones, pequeños peces y pulpitos”.

Ese promontorio se conoce desde la época de Hernando de Magallanes como Cabo Blanco y existen miles de historias de navegantes y piratas que lo nombran. El hallazgo de boleadoras, anzuelos, arpones de hueso y puntas de flechas demuestra que en la zona también vivieron aborígenes.

Otra pequeña caminata y accedimos al faro, que está cerca de sus 100 años de vida y ubica su luz a unos 87 metros sobre el nivel del mar con un alcance de 14 millas náuticas. Lentamente subimos sus casi 100 escalones para maravillarnos con una vista extraordinaria de las pequeñas islas habitadas por infinidad de osos marinos, como también se los llama.

Sobre nuestra cabezas sobrevolaban enormes aves, los cormoranes que también tienen sus nidos en las rocas. Los hay grises, imperiales y de cuello negro.

Nuestros ojos no llegaban a divisar el amplio mar que se extendía por detrás de una pequeña bruma que marcaba el atardecer. Consultamos al farero, persona que cuida el lugar, como excusa para no retirarnos.

Nos contó que es habitual ver práctica de kayak de mar y que muchos conocedores de esa actividad eligen esta zona entre islotes, para lo cual es necesario estar en forma. También se realizan prácticas de eskimo roll, un original método de rescate.

De regreso hacia Puerto Deseado ingresamos en una zona de salinas de gran extensión, de características diferentes a lo que habíamos transitado hasta ese momento. A comienzos del siglo XX fueron utilizadas en la industria lanera, ya que con la sal se conservaban las carnes y cueros.

Con los últimos reflejos del sol, regresamos a la ciudad y, a pesar de lo agreste del paisaje, volvimos convencidos de haber realizado una excursión que no olvidaríamos y de la que hablaríamos a nuestros amigos con entusiasmo.

Autor Marcelo Sola Fotografo Palmiro Bedeschi

Contacto de la excursión o paseo


Cis Tours

San Martín 916 Of. 1, Puerto Deseado, Santa Cruz, Agentina

Teléfono Teléfono: +54 297-4872864

Tipo de tourTipo de tour: Safari fotográfico, avistajes de fauna y observación de aves, kayak
DificultadDificultad: Media
DuraciónDuración: Medio día y/o día completo, según la actividad a realizar.
Cómo llegarCómo llegar: El acceso a la región se debe efectuar a través de la ruta nacional 281 de asfalto hasta el km 24 y desde allí por las rutas provinciales 14 y 91, ambas de ripio. En total son 88 kilómetros.
De octubre a marzo.
Organiza tu viaje con: interpatagonia.com | welcomeuruguay.com | welcomechile.com